dijous, 12 de gener del 2012

Devenir Fantástico


La fantasía tiene que ver con la intuición y no con la reflexión. En la intuición los pensamientos no se pliegan sobre sí mismos para producir otros nuevos, sino que surgen del movimiento propio de los pensamientos en conexión con otros de otro tipo o semejantes. Los pensamientos se conectan entre sí para producir realidades que rompen la Realidad. Las realidades que crean los nuevos pensamientos surgen de las conexiones creando una pseudo-realidad opuesta a la Realidad. Esta pseudo-realidad se caracteriza por carecer de esencia, ser y orden. Los pensamientos que ocupan la nueva realidad no obedecen a estas tres leyes creadas para organizar el mundo.

Lo que pretenden no es desorganizarlo sino re-construirlo. El mundo está construido bajo unos esquemas conceptuales u otros. La imaginación desdibuja los órdenes bajo estos conceptos y construye otros nuevos sin destruir los anteriores. Los esquemas del “ser” tradicional desaparecen siendo ocupados por una nueva idea de ser. El ser infinito. Este ser es aquel que no “es”. No necesita ser para existir. De este modo se puede decir que es un ser que existe y que no es. Los esquemas de creación existen y no son. Como son productos de la intuición no obedecen a la razón y, por tanto, no tienen una razón de ser.

En esta pseudo-realidad los esquemas mentales se re-dibujan a voluntad llevados por el devenir que produce la intuición en el plexo (esquema) mental. Esta pseudo-realidad o súper-realidad la ocupamos con modelos imaginarios derivados de la intuición. Por modelos imaginarios me refiero a las “cosas” que se construyen sin voluntad de “ser”, sino con simple voluntad de existir. Voluntad de “ser” significa todo aquello que quiera parecerse a lo “real” de la Realidad, o a todo lo que está presente en la Realidad sin mediación humana.

Como estos modelos sólo tienen voluntad de existir sus contornos o esquemas que los forman se parecen en poco o en muy poco a lo que vemos en la Realidad. A menudo se toman ejemplos de la Realidad para construir una nueva que no existe en la primera, aunque en ocasiones se parezca mucho a ella. Todos los modelos creados tienen en común que obedecen a la idea de “creación” no producida por la razón sino por la intuición; esta no es razonada, sólo indaga en nuestro plexo mental a fin de encontrar/crear una idea de la que se sigan las demás por puro devenir.

Entonces el devenir se vuelve “fantástico”, porque crea cosas nuevas a partir de otras, y así sucesivamente hasta llegar a construir una súper-realidad nueva y característica de la idea de intuición-creación.